Vistas de página en total

Mostrando entradas con la etiqueta UNA IMAGEN MEJOR QUE MIL PALABRAS. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta UNA IMAGEN MEJOR QUE MIL PALABRAS. Mostrar todas las entradas

martes, 25 de marzo de 2014

UNA IMAGEN VALE MAS QUE MIL PALABRAS

Desde hace años comparto con mucha gente la afición de la fotografía. Desde niño siempre vi y recuerdo a mi padre con la cámara colgando, también recuerdo las torturas de posados familiares, con mi madre, hermanos y familiares, incluso aquellas películas de superocho que tanto amenizaban las tardes de los domingos, antes del dichoso partido de fútbol o la típica tarde de toros, retransmitida por la uno.

Todo ha cambiado, jamás hubiéramos podido intuir como iba a evolucionar todo, tanto a nivel psíquico como físico, sin detenernos en los avances informáticos y medios de comunicación, pero lo que ha quedado ralentizado en el tiempo es que una imagen vale más que mil palabras, y esto no es un concepto tan reciente sino todo lo contrario.

La imagen a lo largo de la historia ha sido un punto fundamental en la comunicación, desde el modo de vestir, al modo de peinarnos. Esta caracterización ha dado imágenes de culturas características tal como podemos distinguir claramente entre la cultura griega y romana; por decir un ejemplo.

Hoy en día y hablando en general estamos obsesionados por nuestra imagen, no discernimos a discutir que una imagen vale mas que mil palabras, pero olvidamos que con un buen contenido, la imagen es opcional y todo lo contrario al mismo tiempo.

Con el nuevo contexto de los medios de comunicación y las redes sociales, hoy es fácil convencer al público con una idea, en cuanto que una buena imagen llega a ser mucho más importante que cualquier contenido.

Pero hasta que punto una imagen es fiable en cuanto si no refleja un contenido cierto, está distorsionando la realidad y manipulando un mensaje, me pregunto.Esta tesitura evidencia que categóricamente nos hemos convertido de una forma genérica en manipuladores de la información.

Sólo queda nuestro pudor cuando aparecemos desnudos ante nosotros mismos y vemos lo que somos, ahí donde solo llega el corazón es donde ya la imagen no revela más que nuestra esencia.

Es por ello que transmitir u ocultar, aquello que define el método DAFO: Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades, depende como manipulemos nuestra imagen, transmitiremos un mensaje totalmente diferente en armonía con nuestros valores o al menos con los que queremos reflejar.

Para cualquier acto social, desde enviar un currículum a como nos mostramos en las redes sociales, estamos tomando decisiones de comunicación por lo que llegado el momento, debemos reflexionar que lado de la luna queremos enseñar o ocultar porque lo que esta claro es que una imagen vale más que mil palabras.

Ferran Aparicio
25 de marzo de 2014