Vistas de página en total

viernes, 30 de mayo de 2014

PREOCUPACIONES INNECESARIAS

PREOCUPACIONES INNECESARIAS

Hay cosas que por su propio .peso caen y en el caso de las preocupaciones eso es evidente. Preocuparnos nos preocupamos todos, pero realmente somos conscientes de lo que significa una preocupación, me pregunto.

La preocupación siempre o casi siempre se asocia a un problema, pero siempre hemos oído de nuestros mayores, en su voz de la experiencia que si tienes un problema hay que buscar una solución, y si no tiene solución ya no es un problema.

La preocupación como concepto es una reacción automática para resolver nuestros problemas, pero se convierte en patológica cuando no somos capaces de resolver aquello que nos preocupa o no encontramos la solución a lo que nos preocupa.

Cualquier preocupación nos abre una multitud de probabilidades donde elegir, lo que libera la capacidad de decisión, el problema surge cuando no somos capaces de dictaminar una solución, esto nos produce un deterioro y una pérdida de energía vital.

Cuando aparece la preocupación se supone que debemos reemplazar esta por una declaración consciente desde tu interior a una elección de confianza que nos aquiete y apacigüe, prestando atención por sincronicidad a observar cual es el mensaje y aprender lo que nos enseña.

Es cierto que los sentimientos cambian en el tiempo, pues aprehendemos de lo que vivimos, pero ante una preocupación se trata de conseguir la armonía y equilibrio para seleccionar cuidadosamente nuestras palabras, acciones y pensamientos, ya que la claridad del problema te ayudará a comprender como creas tu propia realidad y su reacción ante ella.

Muchas preocupaciones viene por el conflicto de personalidad entre el yo real y el yo ideal, pero nada viene por casualidad y quizás lo que hay que buscar es el mensaje que cada preocupación conlleva y atenderla en el tiempo justo y necesario.

Ante una preocupación dicen los especialistas que hay que reaccionar con consciencia y aquietar el ritmo de actividad para evitar el victimismo que con frecuencia refleja un fallo de comprensión de las muchas razones que embeben el propósito y significado de cada suceso ya sea de naturaleza personal o de alcance global. No importa que pienses lo que tienes que hacer, ya que siempre existe una opción para solucionar el problema de forma armoniosa, lo importante es no acumular demasiados problemas y atender las razones de una en una.

Cada uno es libre de actuar según su propia conveniencia, pero lo que esta claro que tener claro que las preocupaciones son innecesarias ya es un logro importante.

Ferran Aparicio
30 de mayo de 2014

domingo, 25 de mayo de 2014

ETERNOS

Siempre hemos pensado que la vida iba a ser eterna, hasta que en un momento nos damos cuenta de lo frágiles que somos. Esto nos pasa especialmente cuando perdemos un ser querido, hacemos una retrospectiva del pasado o simplemente recordamos a gente que ya no está entre nosotros.

La pura realidad es que sabemos conscientemente que eternos no vamos a ser nadie, que estamos de paso, que simplemente crecemos como personas o al menos lo intentamos y aun así cometemos los mismos errores, no priorizamos lo que más podemos disfrutar, dejando para mañana lo que no nos apetece hoy.

Hasta aquí creo que tenemos todos, todo claro, no hay que hacer un master de especialización para entenderlo, sentirlo o simplemente vivirlo.

Sin embargo lo eterno como concepto es muy relativo y lo podemos sentir muy positivamente como a una existencia sin tiempo o fuera del tiempo.

Una de las sensaciones del concepto eterno entre otras muchas, no relacionadas con la inmortalidad, es cuando uno pierde el sentido del tiempo, del movimiento y de la materia, y eso sucede por ejemplo cuando nos sumergimos en un fondo marino y perdemos la línea del horizonte.

En ese momento ya no existe el tiempo, no existe la materia como tal y no existe el movimiento pues como decía Aristóteles son los únicos principios que son eternos, y sin embargo han existido y existirán siempre.

Tenemos la mala costumbre de dejar para luego principios y cosas como pedir perdón, decir te quiero o simplemente decir lo siento, y no somos conscientes de que no somos eternos y somos susceptibles de no llegar a tiempo.

La vida que llevamos nos automatiza material y sentimentalmente y nos hace olvidar del placer de sentimientos gratuitos y placenteros, como es la gratitud de los pequeños detalles y sentimientos.

Tenemos la mala costumbre de dar consejos y juicios de valor sin ser conscientes del poder que pueden tener nuestras palabras, creyendo que lo sabemos todo.

En conclusión pensemos que la eternidad es un concepto relativo y que somos eternos por nosotros mismos en cuanto seamos conscientes de disfrutar cada momento como si fuera el último, sin que la mala costumbre sea la invitada de honor en los días que nos quedan por vivir a partir de hoy.

Ferran Aparicio
25 de mayo de 2014

martes, 20 de mayo de 2014

PARANGON

Llevo una temporada pintando, esculpiendo, diseñando; es decir lo que me pide el cuerpo en cada momento en definitiva :creando, con distintos medios de acompañamiento sonoro, radio, televisión, ivoox,…,que los tengo como fondo y a los que les presto mediana atención , es decir , los atiendo si me llaman la atención , si no simplemente es un rumiar o voz de fondo que me acompaña en mi absurda soledad.

Pero lo que si he observado como si sonara la voz de alarma o rociador automático es que últimamente mucha gente está utilizando la palabra, parangón.

Hay modas y modismos en las distintas etapas que vamos viviendo y ahora parece que a la gente de culto, le ha dado por la palabra “parangón”.

Parar asegurarme y es cierto que las palabras, así como los hechos y muchos conceptos, fuera de su contexto difieren su significado, lo busco en red y no me aporta más que culturizarme del origen etimológico de la palabra.

Todos los medios coinciden en que la palabra parangón se emplea como sinónimo de comparación de igualdad o semejanza, lo que imperativamente implica la comparación entre dos realidades, sucesos, objetos, personas, talentos y talantes,…, por decir algo.

Pero el origen etimológico de parangón está vinculado al concepto griego de “piedra de toque”, como piedra negra empleada por los alquimistas y joyeros para determinar la calidad de la plata y realizar comparaciones con los metales preciosos, y así poder determinar la igualdad y semejanza entre estos.

Lo que da culto en la actualidad a esta palabra no es su efectividad sino su negatividad, en el sentido que actualmente se utiliza más el término “sin parangón”, que la igualdad o semejanza que nos transmite “parangón”.

Lo que me llama la atención y hablando en general es que la ausencia de parangón , es decir la ausencia de semejanza , es decir “sin parangón” , resulta más bien simbólica en cuanto a concepto de comparación entre dos cosas , personas , países o lo que se les ocurra, pues siempre pueden ser comparadas, aún cuando sus particulares sean diferenciales. Sin embargo cuando decimos de algo ”que no tiene parangón”, es decir algo “sin parangón”, estamos afirmando que ese algo es incomparable al no haber nada con que compararlo.

Como verán ustedes, esta palabra es algo subjetiva, relativa y conceptual como muchas cosas en la vida. Si algo se le caracteriza como “sin parangón”, necesariamente no debe tener precedentes, por que si los tuviera ya no sería “sin parangón”, sería simplemente comparable con ese precedente, lo que a su vez que algo no tenga precedentes no significa que sea sin parangón, porque podría a partir de ese momento ser comparable con otros sucesos, cosas y objetos similares.

La temporalidad, el contexto y quien lo diga y como lo diga, también son una referencia en su significado. Si las utilizamos con referencia simplemente al presente al pasado inmediato, que aunque realmente no exista con que compararlo, puede relacionarlos con un referente en el pasado como en la famosa piedra negra de los griegos.

Aunque no es parte de mi lenguaje cotidiano ni familiar, siempre se aprende algo como la alegría de vivir cada día, eso si desde la sencillez y la humildad “sin parangón”.

Ferran Aparicio
20 de mayo de 2014



jueves, 15 de mayo de 2014

INDIGO

Siempre tuve una debilidad especial por el color índigo, de todos los colores del estuche siempre tendía a acercarme de una manera espontánea a este color, sin más.

Hace ya un tiempo no se si por casualidad o por causalidad, en una conversación espontánea con la psicóloga del centro publico donde trabajo, sacó el tema de los niños índigos, por mucho que le pregunté de una forma persuasiva, me dio una respuesta generalizada definiendo los niños índigos como: niños hiperactivos, con una gran creatividad y una manera intuitiva de afrontar la vida.

Nunca es tarde cuando la dicha es buena, es cierto que yo intuía perfectamente de lo que me estaba hablando, pero quise investigar sobre esta materia.

Hoy en día es fácil investigar gracias a las delicias de Internet. Siempre suelo empezar por buscar una aclaración básica y en eso la wikipedia es especialista, sin embargo en esta definición se ha quedado un poco sectorial definiéndolos como: “niños índigo” es un concepto utilizado en el contexto de la llamada “corriente de la nueva era” o “New age”, para referirse a niños que representarían un estado superior de la evolución humana.

La verdad es que no estoy totalmente de acuerdo con esta definición y su desarrollo, y después de haber investigado con otras fuentes cercanas a la psicología , creo que simplemente los niños índigos, definidos así, pues supuestamente tenemos el aura de este color, son niños o personas no tan niñas , que tienen la característica general de ser muy creativas, y en general les encanta construir, diseñar cosas, sin parar, siempre inquietos, pudiendo variar su conducta emocional desde el llanto a las fuertes risas, teniendo predisposición a hacer las cosas por si mismos y sólo aceptan ayuda del exterior si se presentan dentro de un marco en que los demás les dejan elegir.

El niño índigo es un niño inquieto que le cuesta mantenerse mucho tiempo en el mismo sitio, y desarrollando altamente sus sentidos y con rechazo a una moralidad estricta y una gran imaginación teniendo tendencias a variar su conducta emocional desde sentimientos de tristeza a una completa desesperación emocional.

También se dice que tienden a aburrirse fácilmente de las cosas que no les llaman la atención, siendo sus patrones mentales y de comportamientos desordenados, en base a su sentimiento intuitivo de vivir el momento que les apetece.

En general son inteligentes, utilizando el hemisferio derecho, por lo que su pensamiento es sistémico analógico, resolviendo los problemas sin necesidad de hacer un desarrollo consciente.

Nada es todo y el todo no es nada, por lo que cada uno es como es y yo personalmente disfruto del índigo como lo que soy, sin más.

Ferran Aparicio
14 de  Mayo de 2014


sábado, 10 de mayo de 2014

TONICOS Y TOXICOS

Nunca me había planteado el por qué, determinados ambientes se enrarecían cuando aparecía una determinada persona,en realidad pensaba que era una cuestión personal de afinidad, pero he descubierto el concepto de personas tóxicas y tónicas y ahora lo comprendo todo.

Ser conscientes de nuestras vivencias es algo que nos hace evolucionar como personas, como lo es también reconocer los agentes que nos rodean y los métodos de aislamiento a efectos de que no nos afecten determinadas conductas de personas que por suerte o desgracia no podemos evitar, simplemente por razón de ser o estar.

En general todos los seres humanos nos gusta rodearnos de personas afines y así funciona el mundo, las amistades y también las relaciones. En general siempre buscamos personas que nos aporten energía, ilusión, alegría, pero lo que también es cierto que hay otras personas que también te las quitan.

El posicionamiento ante la vida es importante a la hora de afrontarla, pues lo que es claro que problemas por livianos que sean, los tenemos todos; sin embargo el posicionamiento ante la vida hace cambiar la actitud de cómo enfrentarnos a estos y en general a la propia vida.

En general podemos dividir esta actitud en dos tipos de personas la tónica y la tóxica. Las personas tónicas no encuentran el problema como un problema sino como un ejercicio para encontrar y ayudarte en la solución más adecuada, sin embargo las personas tóxicas son aquellas que sólo saben focalizarse en el problema y si intentas rebatir su actitud ya están desechando tu solución por inercia por un motivo u otro.

Sin grandes argumentos todos intentamos evitar de una manera clara este tipo de personas por que nos generan una sensación de malestar debido a su toxicidad, sin embargo en ocasiones nuestros vínculos bien sean laborales, bien familiares o simplemente sociales, no nos impiden el tener que mantener el contacto con ellos.

Como es lógico y también por inercia nosotros intentaremos pasar el menor tiempo posible con este perfil negativo y el máximo con los positivos, es como la típica idea que decía algo así como que los amigos los eliges tu y la familia te viene asignada, pero teniendo claro el concepto, la solución es evitar su afección y pasar el menor tiempo posible con ellos, pues aunque no lo queramos reconocer en la afectividad la toxicidad también produce contagios y graves, si no se sabe controlar conscientemente.

Es cierto que por dejadez o pereza, muchas veces hacemos cosas que no nos benefician en absoluto, pero también es cierto que tener abierto el interruptor de la cosnciencia nos permite reconocer enseguida una persona tóxica que sabemos positivamente que no nos va a favorecer.

Cuando se toma consciencia se distinguen claramente y en este caso hablamos de solo dos posibilidades y de una única opción,..., afrontar la vida con actitud positiva.

Ferran Aparicio
10 de mayo de 2014





lunes, 5 de mayo de 2014

FOCALIZANDO

Ya hemos pasado el inicio de la primavera, el agotador cambio de horario que nos desestabiliza totalmente, el cambio de temporada, de hora, de hábitos, de luz, de temperatura; demasiados cambios en tan poco tiempo y se me ocurre después de ver que todo pasa tan rápidamente que habrá que empezar a focalizar un poco.

Si hay algo que caracteriza esta etapa que estamos viviendo es la rapidez con que pasa todo sin ser conscientes de lo que realmente significa cada acontecimiento en nuestra vida como eslabón de la cadena en la cual, cada eslabón sucede al siguiente formando una largo recorrido, o al menos eso esperamos todos.

La cuestión se plantea cuando un día te das cuenta que no focalizamos los estímulos y sucesos que vivimos a diario. Perdemos claramente el sentido de lo que hacemos, bien porque hacemos demasiadas cosas a la vez o bien por que las hacemos por rutina, sin darnos cuenta de que nuestro cerebro actúa por costumbre y no selectivamente.

Me hace gracia aquella reflexión de un curso que hice titulado conducción eficaz , en el que se decía que si lo pensamos agriamente, nuestro cerebro es el que domina el coche en cuanto manda la orden de cambiar una marcha o frenar, sin que realmente nuestra voluntad intervenga selectivamente.

Este hecho es innegable pues todos los que conducimos lo vivimos a diario y frecuentemente, pero si traspolamos este concepto a otros campos de nuestra vida nos damos cuenta que no focalizamos nuestras propias actuaciones ya que nuestro cerebro como sistema intelectual operativo permite que varios procesos sean ejecutados al mismo tiempo.

Pues no, señores; una cosa es la rutina y otra cosa es el cerebro, investigaciones científicas han demostrado que cuando realizamos una actividad nuestro cerebro está funcionando en toda su totalidad, pero nosotros solo somos conscientes en nuestra parte racional. Los actos reflejos suceden de una forma inconsciente y no son accesibles a nuestra consciencia, independientemente de que se produzcan de una forma automática.

Este procedimiento nos ocurre a todos los humanos y quizás y solo quizás porque queremos hacer más cosas de las que realmente podemos controlar, por ello resulta más efectivo focalizar nuestras acciones, dando un orden de prioridad a nuestras acciones , lo que generará un mayor y real rendimiento.

Resulta muchas veces difícil el centrarnos y focalizar nuestros intereses en un mundo que va cada día más deprisa y que contiene mayor cantidad de información, con los nuevos medios de comunicación social, por ello les animo a focalizar sus intereses pues yo lo intento cada día desde que me levanto hasta que me acuesto.

Ferran Aparicio
5 de mayo de 2014