Vistas de página en total

jueves, 30 de junio de 2016

idealist@s: INCONSCIENCIA BASICA

idealist@s: INCONSCIENCIA BASICA: Si hay algo que cada día me llama la atención son los mensajes que la vida nos da y el poco caso que les hacemos, bien por ingenuidad, bi...

INCONSCIENCIA BASICA

Si hay algo que cada día me llama la atención son los mensajes que la vida nos da y el poco caso que les hacemos, bien por ingenuidad, bien por falta de interés en el mensaje que nos aporta o bien por que no nos interesa especialmente el contenido de lo que expresan.

Muchas veces he hablado de la casualidad y la casualidad y soy el primero que sin una consciencia clara, los paso por desapercibidos. Sin embargo el fenómeno de la causalidad está muy ligado al lenguaje del subconsciente y de ese mundo que todos tenemos encerrado en las profundidades de nuestra mente y los profesionales llaman subconsciente o estado inconsciente.

El estado inconsciente se caracteriza por el fenómeno de la repetición, cuando algo sucede o se repite a través de lapsus, actos fallidos o simplemente en los sueños es cuando hay que empezar que traspasarlo al mundo consciente y tomar o plantear las medidas oportunas en su caso.

El inconsciente es la fuerza soberana que nos empuja a elegir no es una decisión razonada, muchas veces si lo pensamos fríamente y detenidamente y con la perspectiva del tiempo, no llegamos a explicarnos porque tomamos una decisión tan importante como fue nuestra profesión actual, nuestro estilo de vida o simplemente la ciudad en que vivimos, dado que el mundo siempre esta lleno de posibilidades y la perseverancia es un don consciente que nos lleva a conseguir lo que queremos. Todas estas elecciones se nos imponen sin saber verdaderamente por qué suceden y es el poder de empujarnos a repetir; nuestra vida late al ritmo de la repetición que el inconsciente impulsa. 

Por otra parte si lo pensamos racionalmente en cualquier acto de nuestra vida es el inconsciente la fuerza que nos empuja a reproducir activamente y de una manera espontánea las mismas conductas ante situaciones muy parecidas, desde la elección del menú en una carta de un restaurante hasta la hora de comprar unos zapatos.

En sentido contrario también hay veces que nos suceden inexplicables accesos a casos, sucesos y situaciones de los cuales no sabemos que los provocan o por que suceden y nos producen una incertidumbre racional desprovista de toda idea a priori.

La verdad y ante ambos casos solo cabe pensar que el consciente tiene en mente un conjunto de preconcepciones útiles, surgidas de su formación y de su práctica y sólo el subconsciente es el que guarda sin razón sus sorpresas justificadas.

En definitiva aprehender a manejar el manual de inconsciencia básica es ante cualquier percepción poco racional; analizar, conocer el momento y el contexto que aparece ese mensaje y llegar a comprender la causa de su manifestación. Los detalles de las circunstancias que acompañan a esos accesos: en qué momento del día, en el trabajo o en la casa, en qué lugar, si está sola, en presencia de alguien o pensando en alguien y muchas otras particularidades son las que cuyo conocimiento me permitirá proyectarme mentalmente, no solo la vivencia consciente de nosotros mismos sino lo que sentimos inconscientemente. 

Ferran Aparicio
30 de Junio de 2016

lunes, 27 de junio de 2016

idealist@s: UN AMOR PARA EL VERANO

idealist@s: UN AMOR PARA EL VERANO: Me resuena aquello tan sonado como que: “las bicicletas son para el verano”, pero también lo es el amor como un concepto universal relat...

sábado, 25 de junio de 2016

UN AMOR PARA EL VERANO

Me resuena aquello tan sonado como que: “las bicicletas son para el verano”, pero también lo es el amor como un concepto universal relativo a la afinidad entre los seres humanos, por aquello de “todo lo que necesitas es amor”, como fórmula mágica y el verano es tiempo de amor y además puede estar definido de diversas formas según las diferentes ideologías y puntos de vista.

Lo que bien es cierto es que el verano además de tener una buena temperatura, horas de luz y de sol y sensación general de bienestar, nos aporta tiempo de relación, como siempre para lo bueno o para lo malo, y es que tanto tiempo de relación, el que la tenga, debe también ejercerse un control consciente de las emociones, pues dicen los expertos que después de un verano, estadísticamente es cuando se producen más separaciones.

La palabra amor nos evoca inmediatamente la sensación de bienestar, así como el concepto de amor y especialmente en occidente ya que dentro de nuestra mentalidad colectiva, el amor es nuestra esencia espiritual que trasciende nuestra vida terrenal. 

Ciertamente, la existencia o no de este sentimiento de su expresión y de su contenido, sin entrar en más variantes dependerá de las creencias que tengamos. 

Para alguien que crea que nuestro cuerpo es todo lo que somos, el amor no es más que el producto de unas prácticas sexuales, pero el significado de la palabra amor no sólo lo hemos de ceñir a las creencias y prácticas físicas, sino también a las espirituales.

La diversidad de usos y significados y la complejidad de los sentimientos que abarca hacen que el amor sea especialmente difícil de definir de un modo consistente, aunque, básicamente, el amor es interpretado de dos formas: bajo una concepción altruista, basada en la compasión y la colaboración, y bajo otra egoísta, basada en el interés individual y la rivalidad.

Es bien cierto que nuestro espacio interno tiene muchos niveles de profundidad, y lo que vemos y en cierta forma sentimos, es lo que aflora en la superficie por aquello de la consciencia de lo presente, pero lo que también es cierto es que hay sentimientos emocionales que se alojan en el interior bajo esa superficie tan reconocida y con el amor funciona de una cierta forma igual; hay amores conscientes y otros que llevamos en otros niveles más interiores y que no afloramos.

Quizás con la llegada del verano sería una oportunidad de bucear en ese interior para visitar las profundidades y atender a ciertas necesidades y sueños, bien como acciones dirigidas a otros o simplemente hacia unos mismo, pero sobretodo basadas en el afecto.

Las emociones asociadas al amor pueden ser extremadamente poderosas, llegando con frecuencia a ser irresistibles, por eso les animo que con un verano por delante, al menos lo utilicen cada uno en su forma y manera como facilitador de las relaciones personales, lo cual ya es un acto altruista y gratificante, aunque sea para uno mismo.

Ferrán Aparicio
25 de junio de 2016



lunes, 20 de junio de 2016

idealist@s: ELEUTERIO, ELEUTERIO,..., SIEMPRE TRISTE Y SIEMPRE...

idealist@s: ELEUTERIO, ELEUTERIO,..., SIEMPRE TRISTE Y SIEMPRE...: El otro día revisando y organizando las fotografías de toda una vida, cosa que les recomiendo, pues aun siendo muy aficionado a la fotogr...

ELEUTERIO, ELEUTERIO,..., SIEMPRE TRISTE Y SIEMPRE SERIO

El otro día revisando y organizando las fotografías de toda una vida, cosa que les recomiendo, pues aun siendo muy aficionado a la fotografía, reconozco públicamente que por vagueza o como decimos todos por falta de tiempo, no lo suelo hacer muy a menudo, me encontré que en todos los viajes siempre había ido a parar al cementerio local, como un punto de referencia de la endosicrasia de un pueblo.

Lo más chocante es después de capturar las imágenes de nuevo llegué a pensar, cuan diferentes eran todos entre si, desde el cementerio de “La recoleta” en Buenos Aires donde la ostentosidad  del estilismo arquitectónico sorprende al visitante al de  Santiago de Chile donde los nichos se multiplican en alturas como si de bungalows se tratara, pasando por la sobriedad de Perú o los escandinavos donde no existen cruces sino piedras con nombres, sobre un mar de césped o nieve en invierno.

Pasear por los cementerios, sea cual fuera el lugar, ciudad o nacionalidad, da una sensación de bienestar en primer lugar, porque tienes la sensación de estar vivo, si lees los epitafios te das cuenta como de distintos somos todos y sobre todo porque encuentras tu propia soledad y la de los demás en un principio de igualdad de destino, que no tiene limite ni de físico, sexo o edad.

No hay mayor soledad que la que transmite un cementerio y allí no hay nada más que símbolos que reflejan a los difuntos y mucha materia orgánica sin espíritu ni alma.

Yo soy de las personas que creen en la inmortalidad del alma y como tal creo en su liberación tras la muerte del cuerpo y estando el espíritu libre de su atadura carnal, solo queda lo supuestamente orgánico, sin embargo es el único elemento pseudo tangible de la memoria del difunto y por todo ello me merece su correspondiente respeto y de ahí la paz y soledad que se respira entre nichos y mausoleos.

Es bien cierto que en contra de la soledad y espiritualidad del cementerio, está el negocio de la muerte bien sea por cremación; bien por entierro y es que hasta para morirse hay que recurrir a la dignidad del dinero  por la parafernalia y negocio que gira alrededor de la muerte, pero también es cierto que hoy por hoy cada uno es libre de elegir como quiere acabar; si al libre albedrío del  sus cenizas al viento de donde le place, bien antes pasado por el horno ó enterrado serenamente en el lugar elegido, normalmente nicho o panteón familiar, pues con la crisis está de moda las reducciones y hoy en contra de lo que sucede con las viviendas cada día cabemos más  en ellos y hasta la Iglesia aconseja vivamente que se conserve la piadosa costumbre de sepultar el cadáver de los difuntos; sin embargo, no prohíbe la cremación, a no ser que haya sido elegida por razones contrarias a la doctrina cristiana.

En fin, esta es la historia de cómo hemos cambiado de concepto cada uno  de nosotros en cuanto como acabar nuestros días, pero en contra de nuestra canción: “Eleuterio, Eleuterio, siempre triste siempre serio,..” les animo a ser felices y alegres , pues al final de una forma u otra , nuestras almas acaban en el mismo sitio.

                                                                 Ferrán Aparicio
                                                             20 de Junio de 2016



miércoles, 15 de junio de 2016

idealist@s: UN SOMBRERO PARA EL VERANO

idealist@s: UN SOMBRERO PARA EL VERANO: Dicen que con el sol del verano es necesario y muy recomendable llevar sombrero, pero también me viene a colación el libro de Edward Bo...

UN SOMBRERO PARA EL VERANO

Dicen que con el sol del verano es necesario y muy recomendable llevar sombrero, pero también me viene a colación el libro de Edward Bono: “seis sombreros para pensar”, y tal cual se define en el libro, dentro de su teoría del pensamiento colateral, el separar las posibles formas de pensar por colores y concretar en distintos sombreros, los cuales puede ser usados para actuar según el objetivo de cada uno de ellos, nos pueden ayudar a encontrarnos con un verano muy placentero.

Cada sombrero independiente de su ala, forma y copa, puede tener un color y en función de su color ayudarnos a pensar de una forma totalmente distinta.

Para Edward Bono el sombrero blanco ayuda a pensar de manera más objetiva y neutral, quizás es el que más combina y el más llevadero, pero también con la radiación del sol es el que más calienta.

Sin embargo el sombrero rojo, afirma que sirve para expresar nuestros sentimientos, sin necesidad de justificación, es evidente que siempre el rojo se ha relacionado con la pasión y es fácil de identificar independientemente del tipo de pasión sentimental que queramos expresar.

Un clásico seria el sombrero negro, sencillo a la par de elegante, pero siempre ampara una elección para ser críticos de una manera negativa y pensar por qué algo no podría salir bien, el negro como color, siempre ha dado una connotación de miedos y negatividad, pero muy a su favor, protege del calor del sol y no calienta la cabeza.

Para los atrevidos y con carácter poco artístico, por aquello de que el amarillo da mala suerte a los artistas, el sombrero amarillo, que muy al contrario del sombrero negro intenta luchar con los aspectos positivos sobre un determinado aspecto venciendo cualquier tipo de supersticiones.

Para los de la esperanza filial, el sombrero verde, que dicen que abre las posibilidades creativas y está íntimamente relacionado con su idea de pensamiento lateral o divergente, siendo en cierto modo empático desde su percepción y conciliador de cualquier situación.

Para los más escépticos en la teoría del pensamiento colateral y que siempre quieren acertar en cualquier situación, el sombrero azul, que es el que controla el resto de los sombreros, controlando los tiempos y el orden de los mismos, independientemente de su connotación. Es el que yo elegiría y si el azul es un azul índigo, entonces éxito asegurado en un verano prometedor.

Al final de todo y antes de empezar un verano prometedor, solo se trata que según esta teoría, aplicar el pensamiento lateral a la vida cotidiana a través de la visualización de la elección de un sombrero, que según el color elegido, nos convertiría cada elección en un habito asiduo para dominar la técnica de alumbrar los problemas desde distintos puntos de vista, permitiría encontrar diferentes, nuevas e ingeniosas respuestas para problemas ya conocidos y que hasta ahora sólo contemplábamos desde la perspectiva de un color.

Quizás y solo quizás, el abrirnos a contemplar la vida desde otro punto de vista y con otro color del que asiduamente lo hacemos, nos permita invertir los problemas, para ver cual es su contrario y ver como se puede solucionar, pues al final de todo, todo depende con el color con que se mira cada cosa y problema, incluso la vida misma.

Ferrán Aparicio
15 de junio de 2016



viernes, 10 de junio de 2016

idealist@s: INHABILIDADES E INCOMPATIBILIDADES

idealist@s: INHABILIDADES E INCOMPATIBILIDADES: La pura realidad es que cada día aprendemos algo de lo que vemos, sentimos o escuchamos y por supuesto leemos , aunque dicen los expertos...

INHABILIDADES E INCOMPATIBILIDADES

La pura realidad es que cada día aprendemos algo de lo que vemos, sentimos o escuchamos y por supuesto leemos , aunque dicen los expertos que de esto último, sólo nos queda el diez por cien de lo que ejercitamos.

En el momento que vamos a vivir de nuevo los españoles de turno o al menos los que decidan ejercer sus derechos, me llama la atención la disfunción semántica que se produce entre los términos de inhabilidades e incompatibilidades, aunque como siempre depende del sentido con que se diga o simplemente la situación  en que se produzca.

Lo que resulta bien claro es que no es lo mismo ser que parecer, y con estos términos ocurre un poco lo mismo, hay una gran diferencia entre la inhabilidad y la incompatibilidad y además es extensible a muchos aspectos de la vida desde el amor al dolor, pasando por el ser y el estar, por no mencionar el esperar,  simplemente por vocación o dedicación.

La inquietud en la gran diferencia entre ambos términos, la marca el tiempo en el que se sitúan estos términos y un poco en la integridad con la que nos enfrentamos a ellos.

Dicen los expertos jurídicos, como siempre según su leal y buen entender, salvo mejor fundamento basado en derecho que las inhabilidades son situaciones de hecho previo a la elección que impiden a la persona postularse validamente para ostentar una situación , ejercicio o profesión, por decir un algo mientras que las incompatibilidades son situaciones de hecho coetáneas al desarrollo de un aspecto , cualidad o en su caso ejercicio de una actuación, generalizando de una forma simple e intentando que ambos términos nos sirvan para cualquier caso o situación.

Las incompatibilidades como concepto comina a la persona a la incapacidad  de hacer, desempeñar o realizar determinados actos, incluso trabajos sin embargo la inhabilidad es un estado previo a la incompatibilidad que determina que la persona no es hábil para el desarrollo de lo que se propone.

Resulta chocante como todos incluso pensando muy diferente nos damos cuenta de cuantas personas inhábiles e incompatibles estamos rodeados.

La voluntad también diferencia a estos términos en cuanto la incompatibilidad otorga la posibilidad a renunciar a seguir actuando, viviendo, o simplemente trabajando con el fin bien de dar una legalidad a la situación o simplemente  liberarse de algo con lo que no comulgamos. Cosa que no sucede con la inhabilidad, porque una vez una persona se encuentre inhabilitada o se un inhábil no tiene ninguna alternativa para superar tal situación, toda vez que no depende de su voluntad.

Les animo a planteárselo, yo ya lo he hecho y he llegado  a convencerme de cuan equivocados estamos muchas veces con los términos con los que convivimos.
                                                          
                                                                      Ferrán Aparicio
                                                                  10 de Junio de 2016


miércoles, 8 de junio de 2016

idealist@s: LA VOZ DE LA CONCIENCIA

idealist@s: LA VOZ DE LA CONCIENCIA: Tuve la suerte de educarme en un ambiente donde el sentido común era la ley del juego. Nunca recibí reproches ni riñas especiales, sino sim...

martes, 7 de junio de 2016

LA VOZ DE LA CONCIENCIA

Tuve la suerte de educarme en un ambiente donde el sentido común era la ley del juego. Nunca recibí reproches ni riñas especiales, sino simplemente una invitación al ejercicio del sentido común,  cuyo consecuencia inmediata estimulaba la reacción de saber si yo había actuado bien o mal.

A la vuelta de la vida y con un grado de experiencia he llegado a tener ese sentido común  como un hábito innato, si bien ha aparecido coetaneamennte la voz de la conciencia como un aliado inmediato a ese habito.

Hablar de la voz de la conciencia es hablar de una propiedad del espiritu humano de reconocerse en sus atributos esenciales y en todas las modificaciones y en si mismo experimenta.

Todos de una forma u otra, y en un momento u otro sin llamar la atención especialmente hemos oído esa voz interior del conocimiento del bien que debemos hacer y del mal que debemos evitar, quizás de una forma inocentemente intuitiva pero con un conocimiento exacto y reflexivo de las cosas que nos estaban sucediendo o al menos intuíamos que nos podían suceder.

También es cierto que todo el mundo ni siente ni padece del mismo modo, quizás y solo quizás porque el grado de conciencia no es igual para todo el mundo y tiene mucho que ver con el conocimiento objetivo, el orden estético y por supuesto con los valores éticos y morales.

Sin embargo la voz de la conciencia aparece siempre en su justo momento, ni antes ni después y trata de persuadir la capacidad de conocer sentir y valorar, interponiendo la receta de los tres ordenes en sus justas proporciones.

Esta fenómeno natural nos da un planteamiento mezcla entre la intuición  el subconsciente traído a la conciencia y la propia inteligencia de poder valorar nuestras motivaciones, deseos y planteamientos dentro de un mundo de libertad propia, llevando todo este proceso bajo la voz de la conciencia a una negociación interna dentro de nuestras propias limitaciones, pero con la libertad de actuación que nuestra vida casi siempre nos da.

No hay que olvidar que recurrir a reflexionar lo que la voz de la consciencia nos indica, no tiene nada que ver con reaccionar con nuestros instintos propios, pues la racionalidad nos diferencia de otros seres vivos , para llegar a ser conscientes de lo que esta bien o mal , o al menos eso a nosotros nos lo parece.

Cada momento nos somete a una decisión, cada decisión origina conflictos y cada conflicto genera tensión, pero es importante escuchar y reflexionar sobre lo que la voz nos intenta comunicar, pues aunque no lo parezca todo tiene su sentido.

                                                               Ferrán Aparicio
                                                            5 de junio de 2016