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miércoles, 10 de septiembre de 2014

COCÒ

Hace relativamente poco y en esos tiempos de espera de una peluquería cayó en mis manos un artículo sobre cocó. Hablar de Cocó, es hablar sin más de Cocó Chanel, por supuesto es como aquellas frases que no necesitan adjetivos, o en caso de personas apellidos, pues indirectamente se referencian en la mentalidad colectiva.

Me llamó la atención como su filosofía de vida, además de anécdotas de su intensa vida se centraban en una actitud positiva y realista, independientemente de todas las penumbras que a todas las personas nos llegan en determinados momentos de la vida por aquello de que la felicidad absoluta no existe, y que a lo largo de una vida hay un tiempo para todo.

Partiendo de lo efímero que resulta todo en la vida, se planteaba en dicho artículo que por su dedicación profesional y su carácter creador, el hecho de que: "Todo lo que es moda; pasa de moda”, aserverando que la moda pasa y el estilo permanece. Es cierto que una de las cosas que he asimilado en mi trato con artistas plásticos, es aquello que dice que el estilo es una forma lógica de hacer las cosas, y como lógica personal permanece y evoluciona en la persona, y este pensamiento se refleja claramente en la figura de Cocó Chanel.

El mismo artículo era chocante cuando desde un feminismo coqueto planteaba como el arte de amar de una mujer se disfrazaba en frases como: "Las mujeres necesitamos la belleza para que los hombres nos amen, y la estupidez para que nosotras amemos a los hombres", lo cual remarcaba el gran carácter y carisma que tenia que tener esta gran y carismática mujer.

Por todos es conocido que fue una de las modistas más prolíficas de la historia y una de las más innovadoras, tanto en diseños, como en materiales, desde hechuras a sombreros, desde colores a complementos y sin dejar su famoso perfume Chanel nº 5, basado en el perfume de jazmín, que fue la primera fragancia en llevar el nombre de un diseñador y fue envasada en una botella de cristal creada por la propia Chanel y que definía como el perfume que anuncia la llegada de una mujer y alegra su marcha,…, después de los que se han sucedido unos cuantos.

Quizás su situación familiar y su educación en un orfanato después de la muerte de su madre, y el marco dentro de una época difícil y complicada, fue la Belle Èpoque, la que lanzó al mismo tiempo al éxito con una línea de ropa informal, sencilla y cómoda, emblemática y mundialmente conocida.

Convencida de frases que la caracterizaban como:"Viste vulgar y sólo verán el vestido, viste elegante y verán a la mujer" ó "No existen mujeres feas, sólo mujeres que no saben arreglarse", desarrollo un estilo propio y una personalidad marcada por el vivir la vida como si fuera el último día y la pasión como componente de una vida.

Quizás y sólo quizás, después de investigar y leer algunos artículos y documentarme, me ha llamado la atención el hecho de que la determinación, la ambición y la vitalidad que aplicaba a su vida profesional y social; hicieron que transmitiera una nueva consciencia basada en que la moda no existe sólo en los vestidos, la moda está en el cielo, en la calle, la moda tiene que ver con las ideas, la forma en que vivimos, lo que está sucediendo, la moda es tan real como la vida misma.

Ferran Aparicio
10 de septiembre de 2014