En estos tiempos hemos cambiado o simplemente nos hemos aletargado al precipicio de la rutina encerrada, yo personalmente en ocasiones he sentido sensaciones de estar viviendo como una brújula, unas veces buscando el Norte y otras el Sur al mismo tiempo, como si de un campo magnético se tratara, capaz de no reconocer en qué punto me encontraba y en otras ocasiones y desde la observancia, he podido ver y reconocer, cuantas contrariedades suceden a mi alrededor, especialmente una vez que pones cierta atención en cuanto y a donde se dirige la gente observada.
Un medio de expresion donde lo cotidiano se expresa intentando aprender a darle tiempo al tiempo, a esperar ese momento , mi momento, nuestro momento, porque todo llega cuando tiene que llegar.
Vistas de página en total
viernes, 19 de febrero de 2021
HIBERNACION EMOCIONAL
Estamos en una época, que ya dura un año y que los especialistas han tildado de hibernación emocional.
Es bien cierto, que como personas nuestra mente es capaz de seleccionar el estado consciente en el que queremos estar; desvirtuando, olvidando o escondiendo ciertos factores o elementos en el mundo subconsciente.
Sin embargo y siendo conscientes o inconscientes, si sentimos la idea, de estar acertados o equivocados sobre la dirección que no nos movemos, especialmente cuando nuestra mente y nuestro cuerpo trabajan al unísono y sentimos una satisfacción vital.
Sin embargo y en medio de esa brújula que siempre busca el norte por definición, se encuentra en medio el alma o ánima, de nuestra psique, de la que no somos conscientes pero de la que proceden los impulsos, sueños, anhelos y en definitiva deseos que nos llevan o nos han traído al momento y lugar donde estamos.
Y cuando eres consciente de esa anima o alma, es cuando llegas a comprender la trascendencia de la existencia del plano interior de nuestro ser que nos demuestra que existe y es importante atender sus necesidades al igual que hacemos con nuestro cuerpo y nuestra mente en un estado consciente.
Este proceso se nos plantea cuando nuestra brújula interior está marcando el norte y nosotros caminamos en otra dirección o simplemente desconocemos a donde nos dirigimos y que dirección estamos tomando. Surge en este estado como una alarma interior muy difícil de explicar y muy relacionada con el sentimiento intuitivo de que algo no va bien y el ánima solicita que reconozcamos su existencia y la tengamos en cuenta de vez en cuando.
Esa revisión o supervisión de nuestro estado anímico, refleja la necesidad espiritual de contrastar los valores existenciales con los reales a efectos de rectificar ese norte que todos buscamos y que no es más que un estado de búsqueda de eterna felicidad que no existe en general, salvo error o excepción, más que como suma de pequeños momentos de felicidad.
Al fin y al cabo nuestro interior, nuestro ego, también tiene necesidad de sentirse satisfecho y cumplir sus sueños y que sus anhelos, sean satisfechos y el alma o ánima que como ente abstracto no tácitamente reconocible nos llama la atención para que de alguna manera atendamos la necesidad interior de experimentar satisfacción y alegría en nuestra vida.
Al final sólo se trata de hacer coincidir conscientemente nuestra brújula exterior con lo que de una forma intuitiva espiritual e interior nos va marcando el verdadero norte, nuestra anima, como siempre , sin más, independientemenet que estemos hibernando y solo espero que sea por poco tiempo.
Ferrán Aparicio
15 de Febrero de 2020
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario