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domingo, 10 de agosto de 2025

DEPRESION CONTROLADA

La depresión controlada no es un término médico oficial, pero se utiliza cada vez más para describir una situación en la que una persona diagnosticada con depresión clínica ha logrado reducir significativamente sus síntomas y llevar una vida funcional gracias a un tratamiento adecuado, sin menos cabo que aunque la enfermedad sigue presente en algún grado, ya no domina la vida del individuo.

Esto no significa que la depresión haya desaparecido por completo, sino que está gestionada a través de herramientas como la terapia psicológica, medicación, hábitos saludables y una red de apoyo.

Las personas que viven con depresión controlada suelen describir su experiencia como un equilibrio constante, pues  pueden tener días buenos y otros más difíciles, pero han desarrollado la capacidad de identificar señales de alerta y aplicar estrategias para no recaer completamente en un episodio depresivo.

Algunos pilares comunes en la gestión de la depresión son: La terapia cognitivo-conductual, psicodinámica u otras formas ayudan a mantener la estabilidad emocional;los antidepresivos o ansiolíticos, prescritos y supervisados por un profesional, pueden ser clave.

El ejercicio, sueño adecuado, alimentación balanceada y evitar el consumo de sustancias contribuyen al bienestar mental y el apoyo de  familiares, amistades o grupos de apoyo son fundamentales en momentos difíciles.

Uno de los desafíos que enfrentan quienes tienen la depresión bajo control es el juicio externo, pues al verse funcionales o productivos, muchas veces se minimiza su experiencia

La depresión controlada no significa que la lucha haya terminado. En muchos casos, es una condición crónica que requiere atención constante, como otras enfermedades como la diabetes o el asma.

Pero no hay que dramatizar, pues muchas personas con depresión controlada logran tener carreras exitosas, relaciones sanas y momentos de felicidad auténtica. La clave está en aceptar que la salud mental es un aspecto más de la vida que necesita cuidado continuo.

Controlar la depresión no es un fracaso ni una debilidad; es una muestra de resiliencia. Requiere fuerza para pedir ayuda, compromiso para seguir un tratamiento y valentía para seguir adelante a pesar del malestar interno.

La depresión controlada es un testimonio del poder de la intervención temprana, del autocuidado y del apoyo profesional. No significa perfección ni ausencia total de dolor, sino capacidad de afrontamiento. Hablar de ella con honestidad ayuda a reducir el estigma y a recordar que vivir con salud mental es un proceso, no un destino.

Tener la depresión bajo control no significa estar siempre bien, solo significa saber qué hacer cuando no lo estás, tienes que tener un equilibrio, una gestión constante, un acto de valentía silencioso.

                                                              Ferrán Aparicio

                                                          10 de Agosto de 2025

 

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