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lunes, 2 de septiembre de 2024

DIRECCION OPUESTA

 


No han tenido usted la sensación que el destino les lleva en dirección opuesta lo que ustedes aspiraban como meta al final de un camino y no hemos comprendido desde la racionalidad que estaba pasando por causalidad o casualidad como siempre.

Pues bien he averiguado  finalmente que  la dirección de tu vida la marcan tus valores, no tus objetivos y esto es una gran verdad aunque vayamos en dirección opuesta

A veces podemos encontrarnos con la sensación de no tener el control.  no somos conscientes de que el tiempo corre  y que dar marcha atrás no siempre es posible. 

Al final después de tantas equivocaciones en la elección de caminos y direcciones te das cuenta  que los valores son direcciones de vida

 Un valor no es un resultado en sí mismo, no es una meta; un valor no se agota, siempre está ahí, porque finalmente está aprehendido, bien por transmisión familiar, bien como resultado de una experiencia de vida.

Los principios y valores definen los actos  que vas a utilizar para darle forma al argumento de tu vida como son aceptación, persistencia, orden, conformidad, imparcialidad o intimidad, que te permite decidir qué objetivos son los que realmente importan.

El problema es que muchas veces no sabemos identificar cuáles son esos valores y qué relación tienen con nuestras áreas vitales, como son ; las relaciones familiares, las relaciones íntimas o de pareja, las relaciones sociales, el trabajo, la educación, el ocio, la espiritualidad, la ciudadanía .

Sin embargo, la trampa está en que muchas veces las soluciones que ponemos en marcha no coinciden con nuestros principios, es por eso que hacemos cosas de las que nos arrepentimos o nos bloqueamos al tomar decisiones y todo ello nos lleva a sentirnos desbordados, agotados o perdidos.

La felicidad es una elección, el miedo al cambio nos encadena a hábitos que no nos producen satisfacción y pasamos más tiempo haciendo creer a los demás que somos felices que siéndolo, lo cual es un puro engaño.

La clave y el primer paso es identificar tus valores y su jerarquía en función del momento vital en el que te encuentras, y así enfocar tu objetivo, estableciendo las metas a corto y largo plazo.

En definitiva los valores formarán las bases sobre los que nos iremos marcando objetivos a lo largo del tiempo y estos objetivos serán los que realmente nos aportan sentido y con los que tendremos la oportunidad de superarnos y de sentirnos cómodos.

Hay que ser valientes y no tener miedo a la vida pues nuestras decisiones son las que nos van marcando nuestra vida, con que ánimo y sin más para adelante, nunca para atrás  incluso cuando tenemos que coger impulso.

                                                       Ferrán Aparicio

                                                   1 de Julio de 2024

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