Desde unos años se ha puesto muy de
moda esta frase: "Menos es más" y yo que me
encuentro en una fase feng shui de reorganización mental, física y espacial, en
todos los aspectos de mi vida, reduciendo al máximo todo lo superfluo e
innecesario, me sorprende pues tiene una esencia fundamental a todos los niveles si lo piensas
fríamente.
El
origen de esta frase es difícil de localizar, hay gente que lo asigna al
budismo y al ascetismo, al Dalai Lama, otros lo asocian
a los arquitectos de la arquitectura moderna
como Ludwig Mies van der Rohe, Walter Gropius o el mismo Le Courbusier,
pero al final todo se reduce al concepto moderno del minimalismo.
Intuitivamente reconocemos por sentido común
que la frase "Menos es más" significa reducir algo a lo mínimo, a los elementos esenciales que componen la
cosa y donde todo lo demás disturba.
Hoy
en día parece que el mundo entero se ha vuelto loco con el orden y dentro de
ese concepto de todo el mundo me incluyo yo y sí, está bien eso de tener las
cosas colocadas, de que la armonía fluya gracias a él, que nuestra casa parezca
recién salida de un catálogo, pero el problema viene cuando eres una persona
desordenada por excelencia, entonces todos esos trucos y la filosofía zen te
parecen de otro mundo.
Cuando
llegas a este estado de reflexión bien por tu edad bien porque necesitas esa
tranquilidad especial que te produce el orden de lo mínimo, te das cuenta que cuantas más cosas tengamos, más tiempo nos
llevará ordenarlas, limpiarlas, buscarlas... y que la vida es un pasar donde debemos
racionalizar nuestro tiempo a lo realmente importante, como familia, amigos,
hobbies.
En
mi caso y en mi casa, estoy aplicando el
“menos es más”, reorganizando el esquema partiendo de la idea que un sitio para
cada cosa y cada cosa en su sitio.
El
desorden genera inestabilidad y simplemente se trata de reeducarnos en nuestra
actitud ante el desorden y una vez organizado,
limpiado y deshacernos de todo lo que nos sobra, si ves algo por medio, recógelo,
llévalo a su sitio inmediatamente, esto hará que el desorden no se acumule.
También
es cierto que el menos es más surge
cuando un día te das cuenta que has evolucionado como persona y ya no eres el
mismo, bien porque tu vida ha cambiado o has cambiado tus inquietudes y cambias
el chip sobre tus hobbies, tu ropa , tus utensilios lo que te va a hacer limpiar y ordenar, no guardando todo lo que ya no forma directamente parte de
tu vida.
Es
bien cierto que además del “menos es más” está el hecho de que para que algo
nuevo entre, algo viejo tiene que salir, pues no se trata de no acumular, eso solo te dará más
trabajo y hará que el desorden crezca, pues finalmente lo que no ves, no lo
usas.
El minimalismo como estilo de vida, no es nuevo, al final solo se trata básicamente de reducir tus pertenencias físicas y
necesidades al mínimo, como siempre,.., sin más.
Ferrán Aparicio
10 de julio de 2018