Cuando hablamos de Peter pan no solo hablamos del personaje mágico de Disney, sino que nos viene a la cabeza el famoso síndrome de Peter pan , cada día más arraigado en los jóvenes de nuestra sociedad.
El Síndrome de Peter Pan hace referencia a aquellos adultos que continúan comportándose como niños o adolescentes sin ser capaces de tomar la responsabilidad de sus actos y la vida adulta.
En general son personas que se niegan a crecer con una marcada inmadurez emocional matizada por una fuerte inseguridad y un gran temor a no ser queridos y aceptados por lo demás.
Atrapados en el síndrome de Peter pan, no pueden desarrollar los roles que han de asumir, como el de padre, pareja o profesional, tal y como se espera en la adultez.
Se pueden reconocer porque muchos de ellos puede que se resistan a independizarse de los padres, mantengan relaciones afectivas superficiales y sin compromiso o no acaben de encontrar su sitio en el mundo laboral.
Así, en el Síndrome de Peter Pan se da una tensión entre el estilo de vida vinculado a la infancia, por un lado, y las exigencias vinculadas a la adultez, etapa caracterizada por la necesidad de asumir responsabilidades y alcanzar metas a largo plazo.
Las personas que padecen Síndrome de Peter Pan pueden parecer despreocupadas y felices, pues viven según la máxima del Carpe Diem, pero al indagar un poco en su vida o persona, afloran sentimientos de soledad e insatisfacción, acompañados de dependencia personal, pues necesitan a su lado a otra persona que satisfaga sus necesidades y les haga sentir protegidos
Los Peter Pan son los jóvenes que vuelan continuamente buscando aventuras pero se sienten incapaces de detener su vuelo y conseguir una estabilidad en la vida real.
Así, en el Síndrome de Peter Pan se da una tensión entre el estilo de vida vinculado a la infancia, por un lado, y las exigencias vinculadas a la adultez, etapa caracterizada por la necesidad de asumir responsabilidades y alcanzar metas a largo plazo.
También se sienten poco realizados con su vida, ya que al no asumir la responsabilidad de sus actos tampoco siente sus logros como suyos ,lo que repercute directamente en la autoestima del individuo.
Además, generalmente las personas con Síndrome de Peter Pan se sienten incomprendidas y les resulta difícil darse cuenta de su problema e ignoran que lo padecen hasta que se da alguna situación crítica y se dan cuenta de que su forma de comportarse y enfrentar el mundo no es efectiva o es anómala respecto a la del resto de sus iguales.
Ferrán Aparicio
20 de Junio de 2024
No hay comentarios:
Publicar un comentario