Vistas de página en total

Mostrando entradas con la etiqueta ETAPAS. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ETAPAS. Mostrar todas las entradas

miércoles, 10 de agosto de 2022

ETAPAS , SIMPLEMENTE ETAPAS

 

La pura verdad es que reflexionando sobre cómo había sido mi vida me di cuenta que tan solo la vida se resume en un conjunto de etapas , simplemente  etapas. Y es que si hubiéramos escrito nuestro cuaderno de Bitácoras, vería como ha ido cambiando el rumbo de nuestra vida en cuanto a etapas cíclicas.

Todos sabemos que los ciclos vitales son la infancia , la pubertad ,la adolescencia, y la tercera edad , aun así si lo pensamos fríamente es como una carrera que la que  como niños ansiosos queremos que todo llegue lo antes posible soñando que llegue a aquello que anhelamos , pero cuando llega  vemos que pasa fugazmente y más tarde cuando llegas a la madurez empiezas a valorar los triunfos y las desilusiones, pero avanzando asumiendo cambios dentro de nuestra humildad esencial en todo ese maravilloso trayecto vital que hemos tenido.

Todos hemos  querido alguna vez que algo llegue lo más pronto posible y al mismo  tiempo  deseado en alguna ocasión que un momento fuera eterno, que el tiempo se detuviera ahí mismo , sin avanzar  sintiendo el éxtasis de aquello por lo que habíamos perseverado, sin embargo es imposible y lo importante dentro de cada etapa es que está  hecha de recuerdos  y de esos buenos momentos que siempre quedaran impresos en

Admitir que nuestra vida discurre un poco más cada día y que avanza con un tic-tac que nadie puede detener, es sin duda algo que nos asusta y que nos obliga a reflexionar, sin tener miedo a ese camino , a esa etapa  a ese constante avanzar.

Somos efímeros en este mundo imperfecto lleno de cosas, y gente maravillosa, pero no hay que tenerle miedo a los años al cambio de etapa sino a la vida no vivida alos años vacíos y huecos de emociones, de triunfos y fracasos nunca experimentados,

En efecto, podríamos decir que en esta vida todo llega, todo pasa y todo cambia, no obstante, hay algunos elementos que deben ser fijos en el camino como son : el amor, el respeto, la dignidad y nuestra necesidad por cultivar el crecimiento personal, deben ser pilares esenciales en tu día a día, sin embargo declinamos muchos de estos aspectos en favor de otras personas y también hay  quien prioriza en algún momento de su vida a sus parejas hasta tal punto, que se olvida de uno mismo.

Y si bien todo es justificable si los sentimientos son intensos, hay que saber mantener el equilibrio, pues cuando pierdes tu capacidad por ilusionarte, cuando tus días están aferrados a la preocupación o la insatisfacción, tu vida ha dejado de avanzar. 

Ahora bien, dentro de este avanzar vital, todos podemos llegar a hacer pequeños cambios en nuestra personalidad e incluso en nuestra escala de valores de acuerdo a las experiencias vividas y todo será sin duda para bien porque forma parte del proceso de aprendizaje y de crecimiento, en esa etapa en la que te encuentras.

No te ancles a los errores del pasado ni te alimentes de nostalgias, la vida no espera a quien se detiene en sus propias oscuridades pues la vida busca luz y su propia libertad, permítete crecer con ella, con optimismo, con ilusión y sencillez.

                                                                Ferrán Aparicio

                                                           10 de  Agosto de 2022

miércoles, 25 de mayo de 2022

AQUIETANDO EL RITMO

Hay etapas de la vida que uno piensa que salir hacia delante no resulta fácil, especialmente cuando, la vida nos sorprende con un golpe, que pequeño o grande nos hace aquietar el ritmo de vida y nuestra actividad física y se lo digo por una experiencia que acabo de pasar.

Sin embargo ahora que ya empiezo a recuperarme y aceptar la ley de vida, puedo decirles que pensar en positivo siempre me ha ayudado a decir que las casualidades no existen y que muchas veces la vida nos pone a prueba con determinados sucesos y solo la perspectiva del tiempo nos ayuda a comprender determinadas etapas de una vida y la trascendencia de las personas que nos unen a ella.

En estos espacios de tiempo donde las cosas no salen a nuestro gusto es fundamental pensar en positivo y mirar el lado bueno de las cosas , las vivencias vividas y aun cuando no seamos los mismos, antes pues nos falta algo importante y después del fatal acontecimiento, la aceptación ayuda a sobrevenir las circunstancias.

La positividad y en el peor de los casos la trascendencia que después de lo malo llega lo bueno , es una forma de salir adelante en la dirección que tu eliges , al menos en el intento.

Es cierto que todos y todas en mayor medida proyectamos nuestros sueños en nuestra vida, si bien hay etapas que sin borrar debemos asimilar para que han servido, pero como decía Serrat se hace camino al caminar, eso sí siempre en una dirección, pues mientras hay vida hay esperanza.

Si proyectas bien tus sueños, los analizas y usas correctamente tu tiempo es fácil que te equivoques, pero incluso en las equivocaciones siempre hay algo positivo , la acción y la reacción ante los acontecimientos que van sucediendo en cada etapa.

Una clave de disfrutar la vida como en lo de beber y comer o cualquier otra acción es dosificar las cantidades, es más fácil disfrutar de la pequeñas cosas que intentar escalar el Everest sin estar preparado.

No es fácil acertar a la primera , pero la perseverancia en focalizar tu sueño es lo que focaliza el poder conseguirlo , no te desanimes si a la primera no lo consigues , solo se trata de vivir cada momento disfrutándolo , por que cuando se consigue lo que te has propuesto , te olvidas de las caídas y fracasos que has tenido , han sido parte del camino, eso sí, simplemente disfrutado de cada momento de la vida.

Te animo que como dice el dicho, te animes a plantearte la vida, valorando el presente y dándote cuenta que existe un final, por lo que focalizando tus sueños viviras o al menos lo intentaras vivir el momento presente; eso sí, siempre desde una actitud positiva y disfrutando de la vida.



Ferrán Aparicio
25 de Mayo de 2022

domingo, 1 de diciembre de 2019

ETAPAS,.., SIMPLEMENTE ETAPAS


Otro año más y sin habernos dado casi cuenta estamos a día uno de diciembre y empieza el preámbulo del espectáculo de la navidad para acabar con esa presunta noche vieja especial, que ya a determinadas edades, nos aburre soberanamente, pues fue objeto de ilusión y descontrol en otras etapas de nuestra vida.

Si reflexionamos en voz alta como muchas veces lo suelo hacer a través de estos escritos, es bien cierto que la vida es un conjunto sucesivo de etapas.

Al principio somos como niños ansiosos y queremos que todo llegue lo antes posible, soñamos con devorar experiencias, con exprimir la vida, con jugar y divertirnos , nada nos afecta  y la consciencia no llega más allá de conseguir ciertos deseos banales que no tienen más que una gran inocencia.

Cuando llega la pubertad, incluso la adolescencia tomamos decisiones, desde cómo queremos enfocar nuestra vida profesional, hasta con quien queremos el resto de nuestras vidas,  con triunfos y fracasos, ilusiones y desilusiones, tropiezos que nos hacen más fuertes, pero en definitiva de una forma consciente e inocente al mismo tiempo nuestra obsesión es avanzar, de asumir cambios y ser humildes en todo ese maravilloso trayecto vital lleno de juventud y energía.

Y la vida sigue transcurriendo, de lunes a domingo y de enero a diciembre, y pasan y pasan cosas, pasmos a nuevas etapas madurez,  incluso llegamos a la segunda y tercera edad y desde la perspectiva del tiempo vemos que los buenos momentos se quedarán impresos en nuestra memoria, bien los recordaremos por fotografías, o con encuentros anecdóticos con gente que ha pasado en nuestro camino.

Admitir que nuestra vida discurre un poco más cada día y que avanza con un tic-tac que nadie puede detener, es sin duda algo que nos asusta y que nos obliga a reflexionar, pero en cualquier caso no hay que tener miedo a esa sucesión de etapas, de ese camino, pues todos tenemos a alguien que se quedó hace tiempo en un punto distante al que ahora estamos viviendo.

Después de todo te das cuenta  que simplemente somos inquilinos temporales de un mundo cambiante pero lleno de cosas maravillosas si centras la atención en ellas y que no hay que tener miedo a cambiar de etapa pues , en realidad es parte del camino.

En la vida todo cambia, excepto las esencias, pues que en esta vida todo llega, todo pasa y todo cambia, pero hay puntos fijos que vamos arrastrando etapa tas etapa aunque cambien de edad y talla y van desde la autoestima a la necesidad de seguir aprendiendo y valorar la pasión como motor  de la ilusión por ir quemando etapas.

La clave en el paso del tiempo, de etapas es en su conjunto  valorar y cultivar ; el amor, el respeto, la dignidad y nuestra necesidad por cultivar el crecimiento personal, que deben ser pilares esenciales en tu día a día, aunque muchas veces  parezcan veletas que guiar con fuerza y entereza en tu camino, en tu etapa,.., sea cual sea.

                                                            Ferrán Aparicio
                                                      1 de diciembre de 2019

domingo, 20 de noviembre de 2016

PUNTO Y APARTE

El punto y aparte marca el final de un párrafo dentro de un texto. Solo podemos hablar de punto y aparte cuando después de ese párrafo viene otro. 

Si es el último, lo que tenemos es el denominado punto final. Los puntos que cierran este párrafo y los dos párrafos siguientes son ejemplos claros de punto y aparte.

En este sentido y como en  la vida misma, el punto y aparte, separan dos etapas o momentos de una vida, que desarrollan contenidos distintos o simplemente diferentes, dentro de una misma línea de razonamiento, que nos refleja a nosotros mismos o en su caso, a nosotros en relación a los demás.

También es cierto y reconocido que tras un punto y aparte, se debe de cambiar  de línea  y comenzar a escribir después de dejar un margen o sangrado a la izquierda, mayor que el resto de las líneas que componen el párrafo, pero como todo en la vida depende de tu propio estilo,..., las reglas pueden ser objetivas o sujetivas, como regla general todos cambiamos de línea cuando ponemos punto y aparte, pero en cuanto a la sangría muchas cada uno y su conciencia decide si seguir en la misma sangría de parramos por la  que su vida ha sido coherente o desplazarse a la derecha por decir un algo y que no le estorbe de alguna forma ninguna letra, frase o concepto en el nuevo párrafo o etapa a empezar o desarrollar.

Hay que tener presente, igualmente, que la elección entre el punto seguido y el punto y aparte es también subjetiva cuando se trata de distintos aspectos de un mismo asunto o idea, lo cual como siempre no es cuestión baladí.

De alguna forma paralelamente me resuena aquello de: historia acabada e historia terminada o sus múltiples combinaciones, historia terminada pero no acabada o en su caso historias acabadas pero no terminadas; lo que demuestra que cada uno escribe el fin de una historia o párrafo como considera oportuno,  voluntaria y coherentemente, si es que el resto de la gente o la vida misma le deja hacerlo.

En cualquier caso lo que tenemos todos claro, son los paralelismos ortográficos y gramaticales y la vida misma, como esencia de convivencia y del propio respeto a nosotros mismos.

Las etapas tienen un principio y final, como concepto de evolución como lo tiene el punto final en cuanto que cierra un escrito, o una parte de un escrito, muy diferente al punto y aparte donde siempre viene otro párrafo, es por ello que paralelamente y como irónica semejanza y sin hacer suposiciones, en esta vida sólo se trata de saber dónde estamos y que es lo queremos, si acabar una etapa, sabiendo que después del punto final ya no hay más párrafos o mantener una continuidad con un punto y seguido.
                                                          
                                                             Ferrán Aparicio
                                                      20 de noviembre de 2016


viernes, 15 de julio de 2016

PARTIDA DE POKER

El otro día viendo unas imágenes de televisión, me resonó una frase que me llamó profundamente la atención. “la partida de cartas,…, no está acabada,…, como la vida misma”, frase que me hizo reflexionar por aquello que te toca doblemente la moral.

Nunca me ha gustado jugar a las cartas ni a juegos de azar, bien por que acepto honestamente el hecho tanto de perder como ganar, bien porque no me gustan los juegos de azar por tener una mentalidad pragmática y racional fruto de mi formación y haber estudiado estadística, y llegar a darte cuenta que el conjunto inverosímil de posibilidades que tiene cualquier combinación matemática es prácticamente ilimitado en función de las variables que entren en juego.

Más chocante es la lapidaria frase que se le atribuye a Willian Shakespeare que decía “ El destino es que baraja las cartas, pero somos nosotros las que jugamos”, y la verdad es que no le faltaba razón, pues en un juego y en la vida mismas hay acciones inmediata en función de una combinación de buenas o malas cartas , pero somos nosotros los que manejamos la combinación de posibilidades de acción y reacción para salir mas o menos victoriosos de la partida.

Las personas somos lo que somos y lo que creemos, sin embargo no podemos evitar tropezarnos con la palabra destino. La palabra destino como tal es algo intimidante en cuanto que nos conecta de una forma trascendental con algo más allá de nosotros mismos y de nuestro control de nuestra vida.

La pura verdad y de una forma confidencial puedo atreverme a decir que no sé si el destino existe o no existe, pero lo que si puedo afirmar es que el camino de la vida está llena de una sucesión de hechos y situaciones que son como una partida de cartas, en la que siempre confiamos en obtener el comodín que nos permita sustituir el elemento que nos falta para completar una situación que nos afecta en mayor o menor medida.

Si existe o no existe el destino, es algo difícil de explicar, pero lo que muchos si sentimos es que sentimos una fuerza interior y exterior que nos va moviendo, sin aparentes signos de firmeza y nos hace estar en cada situación en su justo momento, ni antes ni después, ni a favor ni en contra, siempre en su justo momento y con su justa intensidad.

Es bien cierto que en esa partida de cartas que todos jugamos, sí o sí, cuando llegamos a esta vida, el destino entendido no como una especie de certeza de lo que va a suceder en el futuro sino como una capacidad de reacción ante el momento que vivimos que ya no existe; el destino nos puede dar unas determinadas cartas, pero lo que hagamos con ellas es cosa nuestra y de ahí depende lo que puede suceder en el plano más amplio de la vida y del devenir de ésta.

Nosotros, cada uno de nosotros, somos los que jugamos la partida y como buenos jugadores de cartas debemos saber y entender que el ganar o perder, no depende tanto de las cartas que te han tocado sino de tu habilidad de jugar con ellas.

Ferrán Aparicio
15 de julio de 2016

jueves, 20 de agosto de 2015

AVE PHOENIX


AVE PHOENIX

Hablar del ave Phoenix es hablar de esa ave que renace de sus cenizas pero también es hablar de Icaro.

Como Icaro, el ave Phoenix siempre está volando hacia un sueño después de renacer.

Posiblemente con alas de cera será imposible soportar que crecemos para saber que no siempre hace buen tiempo, que hasta las sombras necesitan de la luz para ser vistas y sobretodo tener claro que nada es para siempre.

En realidad en este teatro de la vida gozamos más , si cabe, de ese efímero rayo de sol tras la tormenta, de esa flor en el desierto o de esa sonrisa que acaba  dibujándose  después de cada tristeza..

No es cuestión de hacer una carta a los reyes magos, ni de pedirle a san Judas Tadeo, algún imposible, pues la vida es más que una carta o una petición. Está claro que la perseverancia me hará sin buscar encontrar lo que añoro.

En cualquier caso sin correr, se que llegaré el primero, pues no persigo ninguna meta por si esta realmente no existe, pero por si acaso disfruto del camino que tal vez me conduzca a ella.

No hace falta saber donde se está exactamente para saber que te sientes y estas bien, sin más. Ni montar a caballo para disfrutar el viento en la cara, ni controlar para disfrutar, ni comprender para saberlo todo.

 Pueden venir tormentas y desiertos que lo desbaraten todo de nuevo. Y más tormentas y mas desiertos, pero siempre sabiendo cual es el momento, mi momento.

 En cualquier caso es en el vivir donde está el secreto y en salir y ver la perspectiva de las cosas el aderezo, en el ir equivocándonos en el camino el acierto.

También tanteo con mis miedos y mis anhelos y busco como gran combustible el amor que no llega, pero en el fondo cada día más anhelo-  Lo disfruto en cierta forma y lo quiero porque hace que germine dentro de mi toda la fuerza de  la vida , más dando que recibiendo.

Ahora y aunque no le guste a mucha gente, me toca ser desde la humildad y sencillez ser comunicador, hacedor y deshacedor de misterios, porque en cualquier caso sigo aprehendiendo.

 En cualquier caso y hoy especialmente  vuelvo a nacer, a reconstruirme , a ser reconstruido, a ser personaje de mi persona y a seguir viviendo, y también  me doy cuenta que todos somos capaces de reaccionar y remontar el vuelo, aunque sea con un poco más de peso.

 

                                                              Ferran Aparicio

                                                           20 de agosto de 2015

 

miércoles, 5 de agosto de 2015

CUESTIONES PERSONALES



Dicen que las bicicletas son para el verano y no falta razón, como muchas veces esta época nos invita a descansar incluso a reflexionar sobre cuestiones personales que nos implican a nosotros mismos, como siempre, sin más.


La temperatura, el espacio vacacional, los días largos llenos de horas, el tiempo libre, el que lo tenga o lo disponga, que en realidad lo disponemos todos, son factores que nos ayudan a replantearnos de alguna forma si realmente estamos viviendo como queremos vivir y aún no es tarde para cambiar.

Si a esto le añadimos la absurda situación coyuntural de tanta pseudo ideología de fondo barato y cutre que nos van bombardeando por las redes sociales, entre unos y otros, y los de más allá, uno llega a la conclusión de que lo que importa responsablemente son las cuestiones personales que al fin y al cabo son las que sólo dependen de nosotros mismos.

Cuestionarse no es un castigo, sino todo su contrario es un procedimiento por el cual te planteas como vas errando inconscientemente por la pura rutina que llevamos los humanos del siglo XXI, sólo en determinadas ocasiones en que la vida nos da un palo es cuando planeamos un cuestionamiento integral personal.

En cuanto a aspectos exteriores, esto no supone ningún trauma, incluso nos viene bien una actualización desde un corte de pelo a ponernos a la última moda, el problema surge cuando hablamos de palabras mayores que afectan a nuestra zona de confort.

Hablar de zona de confort es hablar de personalidad, de profesionalidad, de trabajo, de tantos y tantas cosas y aspectos que confortan nuestra vida, incluso de vivienda, eso sin tocar la economía, también es tocar nuestras creencias aquello que hemos ido puliendo en el tiempo, pero reconociendo que el cambio es necesario o al menos cuestionable.

Hay gente que su vida es pura rutina y no necesita más, sin embargo aunque sea de una forma intuitiva podemos afirmar que la vida nos va llevando de etapa en etapa y esto de alguna forma hace que nos sintamos diferentes.

No es fácil enfrentarse a uno mismo, a ese yo verdadero, pues disuadimos aquello que no nos gusta obviándolo, pero es justo y necesario el plantearlo, pues sólo vivimos una vez y vale la pena sacarle partido al presente como medio de evolución al menos a un futuro inmediato.

Les animo a revisar sus actuales patrones y creencias como cuestiones fundamentales personales, pues yo ya lo estoy haciendo en esta etapa estival y en la lucha por el cambio espero valga la pena, por al menos haberlo intentado.

                                                                     Ferrán Aparicio
                                                                 5 de Agosto de 2015